ARNADÍ

Ingredientes:
1 calabaza (de las de forma de cacahuete)
2 boniatos
200 gr. almendra molida
350/400 gr. azúcar
2 yemas de huevo
ralladura de 1 limón
almendras crudas peladas y piñones enteros para poner encima
1 pizca de pimienta negra
1 cucharadita de canela en polvo

Se asan los boniatos enteros empaquetados en papel de aluminio y la calabaza partida en dos, todo junto en una fuente de horno, cuidando que no se queme la calabaza, más o menos 1 hora o hasta que esté todo cocido.
Cuando se pueda manipular se vacía la pulpa de los boniatos y se reserva, y se quitan las hebras y las pepitas de la calabaza. La carne de la calabaza se aplasta y se pone en una bolsa de tela a escurrir toda una noche.
Al día siguiente trituramos conjuntamente la carne de los boniatos y de la calabaza ya escurrida y lo pesamos (más o menos 900gr.). Ponemos al fuego suave la mezcla en una cazuela junto con el azúcar (pesar la mitad de lo que pesa la mezcla de calabaza y boniato) y las yemas removiendo unos 20 minutos. Añadimos la canela en polvo, la ralladura de limón y la almendra molida y removemos 5 minutos más.
En una cazuela de barro vertemos la mezcla y le damos forma de montaña. En una sartén con una gota de aceite ponemos a dorar un poco los piñones y las almendras con la pizca de pimienta negra. Los vamos colocando pinchándolos en la masa, espolvoreamos todo con azúcar mezclado con canela y lo horneamos a 150º durante 35 minutos, vigilando que no se quemen las almendras y los piñones.